El
siguiente diálogo es una ficción, absoluta y total ficción. Estas cosas nunca
pasan en la realidad. ¡Nunca pueden pasar!, así que no le busquemos relación alguna
con hechos verídicos.
La escena
se desarrolla en la Embajada de un poderoso país de habla inglesa en el
territorio de una pequeña república pobre, marcada por la corrupción y la
impunidad.
FUNCIONARIO
DIPLOMÁTICO: (hablando en español con acento inglés) Mr. H. Ante todo,
felicitaciones una vez más por haber ganado las elecciones. ¿Cuándo es que
asume como nuevo mandatario?
PRESIDENTE
ELECTO: El 14 a las 14:30 hs.
FUNCIONARIO
DIPLOMÁTICO: Bueno…. Allí estaremos saludándolo. Por otro lado, nos alegra
mucho que hoy nos visite en la Embajada.
PRESIDENTE
ELECTO: Para mí es un honor que me hayan tomado en cuenta. Ya saben que estoy absolutamente
a su disposición.
FUNCIONARIO
DIPLOMÁTICO: ¡Muy bien, muy bien! Así me gusta: que seamos buenos friends…
digo: amigos. Mire Mr. H.: el motivo de nuestra llamada es para ver si entre
todos podemos lograr algo.
PRESIDENTE
ELECTO: Usted dirá, Excelentísimo Señor Embajador.
FUNCIONARIO
DIPLOMÁTICO: Sabemos que usted ser un gran demócrata, que lucha por la
democracia en su país y en el mundo. Y la verdad: nos preocupa muchísimo que en
Vene-tacón haya una narcodictadura.
PRESIDENTE
ELECTO: ¡Por supuesto! A mí también me preocupa. Hay que sacar de una buena vez
a ese usurpador.
FUNCIONARIO
DIPLOMÁTICO: ¡Exacto! Para eso lo llamamos. Mire Mr. H.: pensamos que sería
bueno que you y alguna gente suya viajen ahora a Vene-tacón, antes de asumir su
mandato, viaje como civil, con otro pasaporte. ¿Me entiende, no?
PRESIDENTE
ELECTO: Mmmmm…., no del todo. ¿Y qué debería hacer?
FUNCIONARIO
DIPLOMÁTICO: Pues ver allá al presidente paralelo, este Guaichó, y hablar con
él.
PRESIDENTE ELECTO: Ahá…, y ¿entonces?
FUNCIONARIO
DIPLOMÁTICO: Invitarlo a su toma de posesión del cargo, y no invitar al déspota
dictador Nicolás Podrido, y luego venir aquí y dar declaraciones mostrando que
en Vene-tacón la gente se muere de hambre, que no queremos que nuesros
democráticos países se transformen en esas dictaduras, que el comunismo-petrolero
es diabólico.
PRESIDENTE
ELECTO: ¡Así se hará!, Excelentísimo Señor Embajador.
FUNCIONARIO
DIPLOMÁTICO: Ya tendrá su recompensa entonces, Mr. H….
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